Diario Gestión
7 de junio 2016
Un factor permanente y otro temporal son los que impiden que el empleo pueda lograr un mayor crecimiento, según la especialista en Derecho Laboral, Katty Ávalos
Según el MTPE, en los primero tres meses del 2016 el crecimiento del empleo no llegó ni a 1% y la especialista en Derecho Laboral, Katty Ávalos, explica los motivos detrás de estas cifras.
El empleo en empresas privadas formales de 10 y más trabajadores de Perú Urbano en marzo de 2016 creció en 0.7% respecto a marzo de 2015, producto del desenvolvimiento positivo de tres de las cinco ramas de actividad económica.
Con este resultado se registraron 76 meses consecutivos con variaciones anuales positivas del empleo. En tanto, en el periodo marzo 2015 – marzo 2016 el empleo formal en Perú Urbano se expandió en 0.8%.
Las ramas de actividad económica con mayor influencia en la variación anual positiva del empleo fueron comercio (2.3%) y servicios (2.1%) seguidas por la rama transporte, almacenamiento y comunicaciones (1.1%).
Sin embargo, la tasa de crecimiento de marzo no es la más baja del año, ya que en febrero se tuvo una expansión de 0.6%, mientras que en enero se tuvo 0.8%.
Solo en diciembre del 2015, el crecimiento del empleo fue de apenas 0.3%, permitiendo que la expansión de todo el año pasado llegue a 0.9%.
Al respecto, Katty Ávalos, especialista en Derecho Laboral de Torres y Torres Lara (TyTL) Abogados, indicó que tendencia registrada por el MTPE se explicaría principalmente en la evolución negativa de la inversión privada, la cual cerró el año 2015 con una caída de aproximadamente 4%, como consecuencia del “enfriamiento” de la economía.
“Esto afectó a sectores clave de la economía nacional como la minería, mercados de cemento, manufactura no primaria, metalmecánica y bienes de capital; que a lo largo del año pasado (e incluso del 2014) han visto disminuida su capacidad de generar empleo”, añadió.
En ese sentido, mencionó que en el mercado laboral peruano ingresan más personas de las que se puede acoger, por lo que quienes quedan fuera se ven forzados a aceptar empleos informales, de baja calidad, con bajos ingresos y con total inestabilidad en el tiempo.
Consultada sobre ¿por qué le cuesta tanto al país no aumentar el empleo formal en 1% o más?, respondió que se debe a un factor permanente y otro temporal, el primero se refiere a la renuencia de muchos sectores económicos de contratar a su personal dentro de la formalidad, debido al temor de asumir los costos y sobrecostos laborales, los cuales suelen ser considerados como excesivos.
“Si a lo anterior le sumamos la segunda causa, que es la falta de confianza del inversionista, basada en la coyuntura electoral que vivimos debido a la incertidumbre respecto al rumbo económico que tomaría el país, luego de elegido el próximo presidente tenemos un gran factor de retraso de la inversión interna y por tanto, de generación de empleo”, anotó.
Sin embargo, indicó que al definirse al ganador de las elecciones se tendrá un efecto positivo en la recuperación de la confianza de los inversionistas, ya que ambos resultan “amigables” con el mercado, lo cual es un factor que genera tranquilidad.
Ver la publicación aquí.