Ante las evidentes noticias sobre el cambio climático, nos preguntamos si nuestro país puede enfrentar esta crisis.

En lo que va del 2023, la presencia del ciclón Yakus vino de la mano con el fenómeno climático denominado «El Niño». Este fenómeno ha tenido en el Perú un impacto totalmente arrollador como sabemos; es un fenómeno climático de calentamiento anómalo en el océano Pacifico Ecuatorial, que conduce a diversos cambios en todo el mundo.

El Niño nos reta con una serie de desafíos. Hemos sido testigos cómo en los últimos años las intensas lluvias han provocado inundaciones y daños en numerosas infraestructuras, afectando tanto a nuestros compatriotas como a la economía de nuestro País. Ante esta situación, no debemos olvidar que el cambio climático no se puede evitar. Sin embargo, lo que, sí está en manos del Estado son las medidas de prevención que este debe tomar para moderar las secuelas que dejó el ciclón Yaku en el norte y centro del país. Según INDECI este ciclón dejó más de 69 muertos, 12,200 damnificados y 31,453 viviendas destruidas.

Es evidente el triste panorama que se ha presentado, sin embargo, nos gustaría destacar que las Obras por impuesto (OXI) pueden ejercer un rol principal, ya que, al ser mecanismos de financiamiento, han demostrado ser eficaces en situaciones de emergencias.

Mediante el Decreto de Urgencia 101-2023-PCM, se aprobó el “Plan Multisectorial ante la ocurrencia del fenómeno El Niño 2023-2024”. Este plan se establece como mecanismo de coordinación y articulación multisectorial de intervenciones entre los Ministerios, sus organismos públicos y las universidades públicas, en el marco de sus competencias. Esto será aplicado en distritos de muy alto riesgo ante lluvias intensas y peligros asociados; así como al déficit hídrico por el posible Fenómeno 2023-2024.

El Ministro de Economía y Finanzas, Alex Contreras, ha hecho énfasis que ante la emergencia climática del 2023 “no podemos darnos el lujo de no seguir apostando por la prevención”. Nos permitimos subrayar este comentario ya que el fenómeno del niño es y será un desafío recurrente en nuestro país y la prevención es sumamente esencial para evitar los efectos devastadores que hemos visto a lo largo de los años.

Por esta razón, a través de las OXI, las empresas privadas pueden contribuir al desarrollo, la reparación y sobre todo la creación de nuevas infraestructuras para la prevención de desastres naturales a cambio de beneficios fiscales, ya que parte de sus recursos se destinan a financiar obras de interés público, como sistemas de drenaje, prevención de inundaciones, reparación de carreteras, escuelas, hospitales, entre otros. Esta participación del sector privado tiene una gran relevancia en momentos de crisis y es sumamente gratificante ver cómo el sector público las reconoce.

Dentro del marco de las OXI, encontramos a las famosas IOARR o Inversiones de Optimización, de Ampliación Marginal, de Rehabilitación y de Reposición. Estas se van a utilizar de manera puntual sobre algún activo estratégico que integra una Unidad Productora en funcionamiento que haya interrumpido la prestación de sus servicios o se haya visto afectada por las declaratorias de Estado de Emergencia.

Es decir, ante la posible de declaración de estado de emergencia por ocurrencia de desastres, se puede hacer uso de la inversión de Rehabilitación en infraestructura y de Reposición ya que mediante estas herramientas se puede restablecer la infraestructura dañada. En estos casos, la unidad en funcionamiento debe registrar y aprobar las IOARR de emergencia en el Banco de Inversiones; una IOARR solo se ejecuta durante un año, sin embargo, pueden ser ejecutadas por más de un año por razones técnicas.

Adicional a ello, en los últimos meses el Ministerio de Economía y Finanzas ha impulsado como medida de prevención el plan “Con Punche Perú: atención a la emergencia” cuyo costo fiscal será más de S/5900 millones de soles, distribuido en tres ejes: 1er. Eje: Atención inmediata a la emergencia, 2do. Eje: Medidas para la prevención, protección y resiliencia de infraestructura y 3er Eje: Medidas para la recuperación de la capacidad productiva e impulso a la vivienda social.

A propósito de la importancia de las OXI como mecanismo de prevención para desastres se puede confirmar que estos son de especial importancia en el 2do Eje, ya que mediante esta reactivación se busca desarrollar un programa de financiamiento de inversiones de rápida ejecución, identificando más de 962 inversiones mediante las IOARR, lo que involucra un monto de inversión por encima de los S/ 730 millones. Se trata de inversiones a efectuarse en zonas de alta conflictividad social como el corredor minero, puentes y otros, en distintos departamentos del País.

Sin embargo, el Perú no es el único país en buscar estrategias ante los desastres naturales ya que existen otros países con perfiles climáticos similares, que no ejecutan OXI y sus Gobiernos han trabajado en la implementación de una infraestructura resiliente. El propósito de esta infraestructura es la creación de sistemas que puedan funcionar y satisfacer las necesidades de los usuarios durante y después de un peligro natural, soportando los impactos del medio ambiente sin que sus servicios públicos se vean afectados. Para lograr esto, los gobiernos han asegurado el cumplimiento de códigos de construcción necesarios para garantizar que las infraestructuras cumplan con los estándares técnicos mínimos.

Japón sería uno de los grandes ejemplos en la implementación de esta infraestructura resiliente. Siendo un país propenso a terremotos e inundaciones, a través de tecnologías avanzadas de alertas temprana, ha logrado posicionarse como uno de los países líderes en la recuperación de su infraestructura en tiempo récord.

Por lo tanto, el fenómeno “El Niño” es un gran desafió en el Perú, pero a través de Obras por Impuesto y las IOARR el Gobierno tiene una gran herramienta para la construcción rápida y/o mejora de la infraestructura.

De manera que, siendo pioneros en la creación de Obras por Impuesto, existe la capacidad de enfrentar y recuperarse de los impactos de este fenómeno llamado “El Niño”, reduciendo asi la brecha de infraestructura social.

Sullyn Effio Heredia, Asociada y Miembro del Área de Infraestructura y Promoción de Inversiones Público de Torres y Torres Lara Abogados.

Fuente: Expreso