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¿Qué analizar al momento de contratar un crédito?

Actualmente, la mayoría de las personas en algún momento de sus vidas requieren contratar un crédito con alguna entidad financiera para ser destinado a un proyecto personal, adquirir un vehículo, una vivienda, emprender un negocio, entre otras necesidades. Lo cierto es que el deseo de adquirir un financiamiento es una posibilidad latente en el normal desarrollo de las personas dentro de la sociedad.

Así, cuando llega el momento de requerir un financiamiento, el solicitante se da a la tarea de evaluar las opciones que le ofrece el mercado, para lo cual toma en cuenta varios factores, tales como plazos, monto, condiciones contractuales, comisiones y, sobre todo, las Tasas de Interés que se van a aplicar al crédito. Es aquí donde se complica la decisión, debido a la complejidad que revisten  los servicios financieros. En efecto, dentro del sistema financiero existen una serie de conceptos que pueden ser de difícil comprensión para los usuarios de éstos.

Al contratar un crédito vamos a escuchar términos como Tasa efectiva Anual (en adelante, TEA), comisiones, gastos, seguro de desgravamen y Tasa de Costo Efectiva Anual (en adelante, TCEA). Es aquí donde el consumidor puede confundirse y decidir contratar un producto que no se ajusta a sus necesidades. Es por esto, que es importante que los usuarios de servicios financieros, tengan claro qué deben considerar al momento de tomar la decisión de contratar un crédito y, más aún, al momento de comparar entre las diversas ofertas que tiene a su disposición.

A continuación, explicaremos brevemente estos conceptos:

  • Tasa efectiva anual (TEA): Esta no es más que el interés compensatorio, es decir, es la contraprestación que se paga a la entidad financiera por el uso del dinero. Esta tasa está calculada en un año financiero, 360 días. En palabras sencillas, al contratar el crédito, el producto otorgado es el dinero, por lo que el contratante deberá pagar un precio por el dinero que se le ha dado para utilizar.
  • Comisiones: Son montos que te cobran las entidades del sistema financiero por brindar servicios adicionales y/o complementarios, que no influyen en el uso del servicio contratado.
  • Gastos: Son montos que el Banco debe pagar a terceros para brindar un servicio a sus clientes. Este gasto es trasladado al usuario del servicio financiero.
  • Seguro de desgravamen: es un seguro que se aplica a las operaciones activas.

Los créditos ofrecidos en el mercado están compuestos por Tasas de interés, comisiones y gastos. Por ello, al momento de evaluar si un crédito resulta beneficioso o no, es necesario considerar cada uno de los conceptos mencionados anteriormente. Sin embargo, esta tarea puede ser muy compleja, ya que es necesario tomar en cuenta qué conceptos y porcentajes se van a aplicar. Es por ello, que a fin de garantizar a los consumidores el acceso a una información clara y de fácil comprensión, la norma de Protección al Consumidor ha establecido la obligación de los proveedores de servicios financieros de informar la Tasa de Costo Efectiva Anual (TCEA) en los productos activos que pone a disposición de los consumidores.

Pero, en este punto, nos preguntamos ¿qué es la TCEA?, la respuesta es bastante sencilla, la TCEA es el concepto que muestra el costo real del crédito, ya que comprende todos los conceptos arriba mencionados. Es decir, la TCEA incluye la TEA, comisiones y gastos aplicados, mostrando la tasa real final que va a tener que pagar el cliente por el uso del dinero requerido.

Tomando en consideración ello, lo que se recomienda al usuario es que, al comparar las ofertas del mercado, lo haga a partir de la TCEA, dado que este concepto le va a dar una idea mucho más clara y precisa de cuánto le va a costar el crédito de forma anual, haciendo de esta manera más sencilla su decisión. Si solo compara la TEA, aun cuando esta sea más baja que en otra oferta, con las comisiones y gastos aplicables, puede incluso arrojar un monto más alto a pagar mensual.

Es importante precisar que la TCEA, a diferencia de la TEA, es una tasa de naturaleza dinámica, lo que quiere decir que incluye todos los conceptos aplicados al crédito. En virtud de ello, frente a la modificación o cambio de uno de estos conceptos, la TCEA se puede ver modificada, lo cual, de ninguna forma, significa que al usuario se le esté cobrando una tasa de interés mucho más alta.

De hecho, sobre el particular, mediante Resolución Nº 0794-2019/SPC-INDECOPI, la Sala Especializada en Protección al Consumidor ha reconocido la naturaleza dinámica de la TCEA, indicando que ésta no puede ser evaluada de forma aislada, sino que debe evaluarse de forma conjunta con los demás conceptos aplicables al producto. Siendo esto así, resulta evidente que la TCEA puede variar con el transcurrir del tiempo o debido a la modificación de cualquiera de los conceptos que la integran.

En otras palabras, si bien la TCEA es útil para determinar qué crédito escoger, así como, con qué entidad financiera contratarlo, debe considerarse que ésta no es estática y que no necesariamente se va a mantener de la misma forma hasta el final, debido a que, si existe la modificación, por ejemplo, en el monto que se abona por concepto de seguro de desgravamen, automáticamente la TCEA va a verse modificada.

Finalmente, queremos cerrar el presente artículo, solo haciendo recordar a los usuarios, que toda la información sobre condiciones, características especiales, tasas de interés, comisiones, gastos y seguros de desgravamen está o debe estar contenida en el contrato, por lo que se recomienda leer cuidadosamente y consultar a un especialista, en el caso que se haya generado una duda sobre los conceptos aplicados al producto activo que está siendo contratado.

Vanessa Rojas Peña, Abogada Asociada Senior y Miembro del área Protección al Consumidor de Torres y Torres Lara Abogados.

 

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